Después del prolongada sequía que
las comunidades han soportado en estos últimos meses, las recientes lluvias han
traído alegría y esperanza a los
agricultores porque la siembra grande sobre todo del maíz ha empezado a recuperarse.
Aunque se informa que en algunos
casos los cultivos ya son irrecuperables porque las granizadas y las nevadas han destruido por completo la
producción agropecuaria, por lo que los agricultores piden a las autoridades
correspondientes realicen las evaluaciones insitu para ser tomados en cuenta
por el seguro agrario.
Es costumbre de nuestros hermanos
campesinos cuando la lluvia retorna y vivifica las siembras, en época del
cultivo y recultivo, hacen sonar con fuerza sus quenas y tinyas, además, cantan
canciones especiales en ritmo de carnaval y en otros pueblos realizan estas
labores agrícolas con “Wankas” y
asperjando chicha a la Madre Tierra en signo de agradecimiento.
“Si continúa las lluvias, hay todavía esperanza de asegurar
la alimentación de nuestros hijos y de nuestros hermanos que viven en las
ciudades”, manifiestan los agricultores de las comunidades campesinas de
Abancay.